El poderoso huracán de categoría 4 continúa avanzando por el Caribe hasta Jamaica, mientras ya sus efectos se hacen sentir en la costa sur de Haití y la República Dominicana. La tormenta dejó un rastro de destrucción en las islas del sureste caribeño.
Según el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos (CNH), hacia las 0900 GMT, el huracán se encontraba a unos 300 kilómetros al este-sureste de Kingston, la capital jamaicana, con vientos máximos sostenidos 230 kilómetros/hora.
«Se espera que Beryl provoque vientos y marejadas ciclónicas potencialmente mortales en Jamaica el miércoles y en las Islas Caimán el miércoles por la noche y el jueves», dijo el CNH en un comunicado. Una advertencia de huracán está en efecto para ambos lugares.
El NHC también informó que se esperaban condiciones de tormenta tropical en algunas zonas de la costa sur de Haití y la República Dominicana.
El paso de Beryl por el Caribe ya ha dejado al menos seis fallecidos, generando preocupación por la rapidez en su formación y por alcanzar la mayor potencia que puede tener un ciclón (la categoría 5) en una etapa tan temprana en la temporada de huracanes del Atlántico, algo que es visto como un “alarmante precedente”.
El lunes en la noche, Beryl alcanzó la categoría 5 (la máxima en la escala Saffir-Simpson, que mide los ciclones por sus vientos), y bajó a 4 el martes por la tarde, según el Centro Nacional de Huracanes (NHC, en inglés) de EEUU, con sede en Miami.
Al menos tres personas murieron este martes en Granada, que se suman a un fallecido registrado el lunes en San Vicente y las Granadinas, islas del Caribe Oriental.
El primer ministro de Granada, Dickon Mitchell, dijo que “posiblemente más” personas han perdido la vida en esta isla y la vecina Carriacou.
Mitchell dijo que “se están haciendo esfuerzos para conseguir un helicóptero para visitar Carriacou dado que el mar sigue muy agitado” y los barcos de la Guardia Costera probablemente no puedan llegar.
La agencia meteorológica de la ONU subrayó que desde que se tiene registro, nunca se había formado a estas alturas del año un huracán de máxima intensidad en el Atlántico.
En la actual temporada atlántica, que va desde el 1 de junio hasta el 30 de noviembre, ya se han formado tres tormentas tropicales con nombre: Alberto, Beryl y Chris, esta última que también tuvo un rápido desarrollo y causó estragos en México.